La instalación de vegetación en las terrazas de edificios para reducir el consumo energético y combatir la polución ya es una tendencia a nivel mundial, sobre todo en países como Suiza, Suecia, Noruega. En nuestro país podemos mencionar un proyecto de ordenanza que obliga a los edificios de la ciudad de Córdoba a cubrir sus techos con vegetación para ayudar frenar la contaminación y oxigenar el ambiente.
Además, los techos verdes transforman los paisajes, aportan calidad de vida, purifican parcialmente el agua de lluvia y alivian el drenaje urbano a las fuertes lluvias.
La empresa holandesa Roel de Boer desarrolló un producto que simplifica la tarea de convertir un tejado en un techo verde. Se trata de un sistema llamado Flowering City.
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