Mientras algunas celebrities parecen ingresar en “clubs” de tendencias dependiendo de cuál esté más de moda esa temporada, otras mantienen un estilo determinado y propio del que no se deshacen sea cual sea el contexto, acorde con su estética y su forma de entender la moda.
Un claro ejemplo es Paris Jackson, hija del fallecido Michael Jackson y Deborah Rowe. La joven modelo, con sus 19 años recién cumplidos, nos sorprende con la misma mezcla de estilismos teen, guiños masculinos y acabados desaliñados que triunfaron en la década de los años 90’s.
Deliberadamente despeinada, indómita e informal, lo que la hace mucho más atractiva y sensual.
Lo cierto es que se dice que el nuevo fichaje de IMG Models —una de las agencias de modelos más prestigiosas del mundo— tiene en su habitación un póster de Nirvana y no duda interpretar canciones de la banda grunge a la guitarra. Ya sabemos entonces de dónde nace su inspiración estética, pertrechada entre camperas de cuero «perfecto», camisas a cuadros oversize, ripped jeans, camisetas de algodón estampadas, zapatillas Converse y sus inseparables botas Dr. Martens.